2 de Noviembre
13 de noviembre de 2015
mis muertos, saben a tomillo,
nuestros muertos, saben a tomillo,
sus muerto, saben a tomillo.
Hoy, todos los muertos, saben a tomillo.
Ayer, mis muertos, en esencia de palmera galoparon por deserticos oasis de anhelo. Ayer, nuestros muertos, subidos en bruma de mar, navegaron por ignotos sueños del azul sin rostro.
Ayer sus muertos, callados, silenciados y muertos, como polvo de estrellas que chilla en el amorfo del universo, invisibles, ya no fueron muertos.
...pero, todos, todos, atados al acorde del mismo desesperado grito.
SoleVenegas.
1 comentario
Juan Ortiz Fernández -
Me enteré de la muerte del verdadero padre...